–Bueno, compañero. Dos días más y ya hemos acabado con el 2021.
–Este año ha sido complicadete, eh.
–Cada día me cuesta más escribir esta mierda.
–Para el año que viene supongo que seguirá el que se chusca a la jefa, ¿no?
–¡Cómo lo sabes! ¡Qué pesado es con lo del virus ese!
–¿Pero de dónde sacó la idea? ¿Y por qué lo alarga tanto?
–Todo el año con las vacunaciones masivas y venga olas y variantes. Ya no tiene puta gracia.
–Si es que no la tenía desde el principio.
–Hombre, lo de la sopa de pangolín tenía su qué. Hay que admitirlo.
–¿No era de murciélago? Ay, no sé. Si es que nadie le hace caso y luego pasa lo que pasa.
–Ya, pero como tiene influencias… Ejem, ejem…
–Al que no le hacen ni caso es al pobre Fermín, que empezó con lo de La Palma y nadie se acordó de él en tres meses. ¡Vaya liada!
–¡Ostras, sí! Nos cargamos media isla por un despiste.
–Y él tampoco decía nada… ¡el muy putas!
–Es que a este ya le va el mambo porque la que montó con el Filomena, ¡Tú me dirás! Menos mal que ahí nos dimos cuenta pronto.
–¡Ey, chicos! ¿Cómo vais?
–¡Hombre, Fermín! De ti hablábamos. ¿Cómo se presenta el 2022?
–Pues traigo una idea… Un meteorito que…
–Tenemos que cambiar de becario, en serio.
–¿Qué pasa?
–Nada, nada.
–Oye, este año también le hemos dado fuerte a la rosca del Mercurio retrógrado, ¿no crees?
–Bueno, es para darle un poco de vidilla a la gente también y que se peleen un poco.
–Ya, pero un retrógrado más y acabamos con familias enteras. Me parece que, para este año, hemos disparado el balance de divorcios.
–Ná, un pequeño conflicto no hace daño a nadie, para el 2022 ya pondremos menos.
–¿Sí?
–No lo sé, es un suponer. Todavía no se ha hecho el calendario de influencias planetarias.
–Jodó, pues como no espabilen…
–¡Qué más dará!
–Ah, no, que yo lo necesito para ver a qué tipejo rico aburrido de su vida subo al espacio este año. Quizás hago un girito de guión y subo a la Britney Spears.
–¡Jajaja! Anda, no hagas broma, que bastante te has pasado ya con esa pobre.
–Que no se queje, que este año me he portado muy bien. Aunque mi prefer sigue siendo la Rociito.
–¡Se nota!
–Lo sé.
–Que bien viven algunos y yo hasta el cuello de trabajo con la falta de suministros y venga a subir la luz, que la gente no se queja ni hace ná… Yo ya no sé dónde poner el límite. Para qué inventamos twitter si solo son cuatro gatos enfadaos.
–Mira, por ahí viene El triste.
–Hola, compañeros. ¿Ha empezado ya la reunión?
–No, todavía, no. ¿Ya tienes preparada la lista de los famosos que te vas a llevar este año?
–Ay, no me hables. Que entre el covid y el cáncer… ¡No doy abasto! Sabéis si este año seguirá…
–Sí sigue, sí…
–¡No hagas gestos obscenos!
–Pos yo acabaré pidiéndome la baja por estrés. ¡Asín no se puede!
–A ver, vosotros, menos parloteo y entrad ya, que vamos a empezar la reunión. Que tenemos muchos temas por decidir y los eventos del 2022 no se van a escribir solos.
–¡Sí, jefa!
–Yo tengo una propuesta…
–¡Que no Fermín, que no! ¡Que el meteorito este año todavía no!